Mind2, Bienestar psicoemocional para empresas
por la Psicóloga Miriam Hernández
La pandemia ha sido un desafío que ha requerido capacidad adaptativa y oportunidades de cambio, un torbellino de emociones, donde a medida que avanzamos vamos aprendiendo, perdonándonos y buscando la mejor manera de avanzar en algo en lo que nadie nos preparó. Durante ese periodo de resguardo, muchas familias enfrentaron retos y situaciones diversas que ayudan a replantearnos qué es lo más importante en nuestras vidas. Para una gran mayoría la pregunta parece responderse de inmediato: el bienestar de nuestra familia y de nuestros seres queridos.
Para comenzar quiero invitarlos a reflexionar sobre un tema que probablemente pocas veces atendemos ¿Cómo se cuidan las emociones?
Empezar a retomar las actividades cotidianas, ha requerido hacer uso de todos nuestros recursos emocionales. Quizás es momento de detenernos a pensar sobre algunas preguntas importantes:
Pues bien, estas preguntas nos ayudan a tomar consciencia sobre cómo se encuentra nuestro estado de ánimo y como éste mismo nos lleva a actuar y lo primero que debemos hacer es:
TOMAR CONCIENCIA.
En la familia es donde inician las primeras relaciones y vínculos afectivos. Nuestros hijos imitarán o generalizarán más las acciones que ven de sus padres, las cosas que les decimos, por esta razón es importante que estemos formados emocionalmente.
Si como padres sabemos identificar bien las propias emociones esto facilitará que nuestro hijo sepa qué le pasa, ya que si soy consciente de mis emociones podré ayudar a mis hijos a identificar las suyas.
Por ello, los invito a gestionar un hogar en el que se caracterice la calma, la armonía y la felicidad, un estilo parental centrado en el diálogo.
Los padres debemos dar ejemplo regulando también las propias emociones y no dejándonos llevar por el primer impulso, utilizando el diálogo y respuestas alternativas ya que tenemos un papel crucial, porque participamos como primer elemento socializador en la educación emocional de nuestros hijos.
Quiero compartir con ustedes estos tips ante un momento difícil:
Finalmente debemos recordar que el mundo está cambiando, toda la vida es cambiante, nos movemos y no sabemos lo que pueda suceder. En todo el mundo, hay conflictos y cada familia enfrenta situaciones diversas. Lo que sostiene a un niño en un mundo cambiante es la familia. Es una red que apoya y cobija con amor aquellas vicisitudes, conflictos y transformaciones. Hablar, cuidar, escuchar, mostrar interés en sus cuestionamientos y comentarios harán que le den lugar a sus emociones y sentimientos.